Cortamos una botella de plástico de 1,5 litros. En la parte del cuello introducimos un poco de algodón y bastante tierra. En el cole hemos usado arena de la playa. Echamos agua sobre la arena y observamos cómo el agua se filtra poco a poco hasta que cae en la parte inferior. Su aspecto es, prácticamente, transparente.
Echamos un poco de Betadine sobre la arena y repetimos el experimento.
La arena se contamina con este producto químico. Vertemos un poco de agua
y observamos cómo el agua sale, también, completamente contaminada con el Betadine.
Aquí podéis ver la diferencia entre en agua de las botellas,
una procedente de la filtración en arena limpia
y la otra procedente de la arena contaminada.